Se terminó las Copa de Oro: la selección mexicana perdió la final 2 – 1, frente a Estados Unidos.
Jugamos bien… perdimos por un gol… por lo menos jugamos mejor… ganamos el primer tiempo, pero nos robaron el triunfo en el segundo… jugamos como nunca y perdimos como siempre.
Muchas son las voces que se escuchan alrededor de lo sucedido con la selección, este fin de semana.
Pero las voces debieron levantarse durante todo el torneo… incluso antes, durante los entrenamientos, durante la selección de jugadores, en tanto se elegía al técnico, mientras se planeaba la trayectoria del futbol mexicano en torneos internacionales.
La prensa ataca “con todo” a la desmoralizada selección y al orgulloso técnico. Hugo Sánchez defiende su posición, señalando que hacía tiempo no se llegaba a la final e ignorando sus promesas: ganaremos la copa de oro frente a Estados Unidos, no más humillaciones. Si me dan la selección yo los haré campeones…
Las muchas palabras de Hugo y los pocos resultados en la cancha, dejaron al técnico mal parado y a la selección “como perro con la cola entre las patas”.
¿Es culpa del técnico? ¿Es la falta de entrenamiento? ¿Es el corto tiempo? ¿Quizás la falta de apoyo?
Si se hiciera una encuesta no nos pondríamos de acuerdo, pero vamos a los hechos….
El equipo mexicano se conformó con las mejores figuras del balón pie nacional. Muchos son jugadores de talla internacional, otros campeones mexicanos, otros grandes iconos del futbol por su técnica y su experiencia.
Los jugadores salieron con ilusiones y con ganas de trabajar en el campo. El entrenamiento aunque corto, se dio; la dirección la tenían y las promesas eran muchas.
Los enemigos del grupo mexicano carecían de fama; y sin embargo, dieron pelea de grandes… Se ganó un juego, se perdió abrumadoramente otro y se panzó a la final.
Panorama general: muchas figuras, gran técnica individual, muchos esfuerzos, poco juego de equipo y muy poca precisión en la mayoría de las jugadas.
Planeación, preparación, contundencia y seguimiento son algunos de los “detalles” que se han dejado de lado en la selección mexicana de futbol.
Críticas se hacen muchas… ¿y propuestas?
La crítica no es constructiva si no se hace un análisis objetivo de los hechos y se valoran los fuertes, se clarifican las bajas, se estudia el futuro, se planea la estrategia, se da seguimiento y se pone en perspectiva todo ello.
México va a la Copa América… conquista no habrá seguramente, pero ésta es la oportunidad de los mexicanos para dar el paso necesario con perspectiva objetiva, estrategia definida, trabajo duro, organización grupal y prospectiva estable y victoriosa. ¡Recuperemos el título de México como el gigante de la Concacaf!
1 comentario:
sobervia actuacion del tricolor el dia de ayer ante Brasil, el futbol tambien se juega defendiendose y el portero siempre es uno más del equipo, creo que se hizo bien en defender la ventaja , esperemos que sigan así, cada paqrtido se ven mejor .
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